Compartimos foto con un panadero de la
zona (O Seixo), que se disponía a dar cuenta de los 11,3 km tras estar toda la noche trabajando, no como otros "blandos" que yo me sé.

Cena agradable en el Muiño do Trigo , amenizada por un camarero que, sin duda, era pariente del mismísimo Almodovar, como delataba su peculiar verborrea y el reguero que dejaba a su paso (¿baba de caracol?. No: aceite.)
Echamos de menos a los ausentes, todos ellos, por una vez, con causa justificada .
No hay comentarios:
Publicar un comentario